Description
Ni este cartel ni su motivo han sido reproducidos en otros carteles. El artista inició su actividad en el verano de 1946, con tres pequeñas piezas, hoy fundidas en bronce y conservadas como recuerdo de estos inicios. Allí nació su experiencia, que duró más de veinte años.
A lo largo de este proceso creativo realizó cerámica, cerámica-grabado, cerámica-pintura y cerámica-escultura. Un proceso de invención, de imaginación, de juego de formas y espacios que recuerdan las palabras de Picasso citadas por Françoise Gilot: “si uno se preocupa de lo que está lleno, es decir, del objeto como forma positiva, el espacio circundante se reduce a casi nada. Si uno se preocupa sobre todo del espacio que rodea al objeto, el objeto se reduce a casi nada. ¿Qué es más interesante, lo que está dentro o lo que está fuera de la forma? Cuando uno mira las manzanas de Cézanne, ve que en realidad no pintó manzanas como tales. Lo que hizo fue pintar muy bien el peso del espacio sobre esa forma redonda. Lo que cuenta es la presión del espacio sobre la forma”.
En este caso la caligrafía juega con la superficie del cartel y se convierte así en una obra pictórica.